CIERRO LOS OJOS. DEDICADO A UN AMIGO MÚSICO, LA SENSACIÓN AL VERLO TOCAR SU GUITARRA.
Cierro los ojos y veo tus dedos zapateando,
brincando sobre cuerdas de seda metálica
afinada en perfecta acústica,
engendrada en caja de noble encina,
silueta de mujer estilizada, vibrante,
perfecta sintonía, entre tus sentidos,
un cuerpo imposible de olvidar.
Tus dedos malabaristas revoloteando,
acordes imposibles, creando, dominando
notas de temperamento indomable.
Composiciones musicales arrojadizas,
que erosionan el sentir mundano.
Escucho notas disfrazadas de vivencias,
en noches harapientas, de pensamientos poéticos.
en las madrugadas de esta ciudad, dormida
que te concede o te roba sentimientos,
te impone o te escamotea creatividad.
Vivimos noches de sonidos vagabundos,
en bares de un barrio desconocido,
sabores a tierra fresca, húmeda como la lluvia,
olores a bosque embrujado por la melancolía
tacto de seda fina, sientes,
cuando tus dedos rozando su vientre rígido,
pasan por todos sus rincones, seduciendo
a esa dulce diosa de la música.
Cierro los ojos y solo escucho melodías,
sonidos envolventes, en esta sombra idílica,
delicadas manos arañando las cuerdas,
hilos invisibles que ronronean ese cuerpo,
arrancando pasiones, emociones extraviadas.
Me envuelve la armonía de tus manos
abrigando tinieblas solitarias,
donde la música por tus manos da calor,
vagabundeando sin destino, ni final por sus oídos
para acabar refugiada en la soñada fantasía.
Un composición musical para un poema
escrito en el silencio de la oscuridad,
en noches de experiencias compartidas,
de trasnochar junto a esa luna poeta
de bailar al son del ritmo nocturno,
Cierro los ojos…..