AYER
Ayer sentí la llamada del viento,
durante la mágica noche de San Juan,
acariciando mi piel, suavemente.
me rozó con afecto la oscura noche,
me sorprendió de repente tu presencia,
sentí mi piel rejuvenecer.
Y tú incrédulo por este momento,
me abriste las puertas de tu pensamiento,
impaciente, apasionado, para decirme palabras,
esas silenciosas, que no suenan en voz alta,
palabras en silencio que se sienten,
que sólo se escuchan con el alma.
Ayer te sentí presente en mi piel,
ayer te cruzaste por mi camino,
hoy me emociono al recordarlo.
Ayer voy descubrí el sonido mudo del viento,
desperté de los tiempos olvidados,
de los recuerdos y sensaciones secuestrados,
ayer me diste la luz para creer en el camino,
ayer me regalaste unas sandalias púrpura,
para continuar andando hacia la vida
con ilusión y creyendo que si, si se puede.
Autora: Marian Rosique